No os extrañe encontrar las fotos sin orden ni concierto y es que esto de ponerse a recuperarlas, escanearlas y blogearlas... se hace así como a salto de mata... no importa, me digo que es como la vida uno no sabe nunca por donde va a salir y de pronto se encuentra uno dando un paso atrás , eso si siempre para coger carrerilla y avanzar dos o tres saltos hacia adelante y aquí lo tenemos bien aferrado al pozo de casa de los abuelos para lograr ponerse en pie. Por la pinta debía de ser muy pequeñajo pero lo logró y después debió de hacer como todos nosotros comprobar si lo que caía allí volvía a subir, ¡las malditas leyes de la física, que luego le trajeron tan de cabeza! seguro que si le preguntamos sabrá continuar la historia.
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